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The Show – Lauv
¡¡¡Muy
feliz lunes!!!
Lo anticipado (en reel, jiiiii) es deuda: hoy vamos visitar, celebrar, aplaudir y recontra querer
ir (y recontra volver, en nuestro caso) a CENTRO Restaurante, una propuesta gastronómica magnífica que
nace de una cocina de estación,
comandada por el chef Fernando Golabek, quien
comparte...
En
Centro nos basamos
en productos de temporada y hacemos foco en frutas y vegetales,
todos orgánicos. Por eso, para
nosotros, la estacionalidad es algo
natural, cocinar con lo que da cada momento del año no se negocia. Tratamos de respetar la estacionalidad a
raja tabla. Usamos todo en su época. Por ejemplo, ahora es época de espárragos, alcauciles y frutillas
que al tener una temporada muy corta me gusta aprovecharlos al máximo.
Cómo banco con
todo mi ser (y mi paladar) una cocina de estación: no sólo porque tiene sentido
(la naturaleza es sabia, sabe cuándo darnos qué, y nos enseña a APRECIAR y
AGRADECER lo que hay cuando hay); además porque nos pone de frente a la
posibilidad de reinventar nuestros platos cada tres meses. Eso en casa cuesta
más porque, si bien soy aficionada a la cocina (y a libros y libros y más
libros de esta temática), ¡soy una simple mortal! Por eso agradezco que profesionales ¡y artistas! como Fernando,
tomen a la temporada como la gran regente de sus cartas, y se luzcan con sus diseños de sabor, color y emoción….
Luego
de trabajar con Martín Berasategui (chef español que cuenta con doce estrellas Michelin) en España, Fernando tuvo otras experiencias
internacionales, rodeado de cocineros y cocineras de todos lados del mundo.
21 años después, el argentino sintió que
era tiempo de abrir su propio lugar.
Así nació Centro,
una esquina porteña donde confluyen
estas influencias con los mejores
productos locales de estación, para asegurar sabores auténticos y contundentes.
“Al armar la carta, o mismo para cocinar en casa, es clave inspirarse en los
productos de temporada, igual de
importante es que sean orgánicos, para que los sabores destaquen más, en
Centro la experiencia es venir a comer la comida que reconforta”, expresa
Fernando y confiesa que, en general, prefiere
que los componentes en el plato sean más de vegetales y las proteínas la ración
más chica.
Justamente
su nueva carta de primavera fue la
excusa de esta muy generosa y amorosa invitación. ¿Cómo resistirse a estas magias…?
Espárragos,
alcauciles y frutillas:
los protagonistas de la temporada en la nueva carta primaveral de CENTRO
Restaurant, aunque también se destacan papa,
lechuga, palta, puerro, hongos, níspero, flores
(manzanilla y rosas), hibuscus y sauco La carta se diseñó con combinaciones únicas y la estación también copó la coctelería. Intuyo que Fernando, al ser
un chico tan viajado, no puede evitar recurrir a los mejores ingredientes del país con los de otras culturas + flores comestibles, para ofrecernos una
experiencia de otro mundo. Literal. Así la vivimos nosotros, pero no me adelanto,
vamos con algunas fotos majestuosas y qué nos muestran…
Alcauciles
Bagna
Los alcauciles están en su mejor momento, por eso me gusta tanto
usarlos. Este es un plato italiano con una salsa típica, que es la bagna
cauda, que tiene anchoas y ajo.
Le sumamos huevo que cocinamos a 63°
durante una hora y de esta manera queda la yema liquida y la clara cocida.
Los alcauciles confitados y sus hojas fritas aportan crocancia, algo
elemental para mí en todos los platos
Ricotta
con espárragos
Como primer punto, la ricota es casera, a los espárragos los blanqueamos en agua hirviendo durante un minuto y el toque especial
es el aceite en donde trituramos hierbas frescas y le sumamos pistachos
triturados, además de limón lo
que le da más naturalidad, ideal para esta temporada
Anticucho
de hongos vegano, salsa de maní, cilantro y lima
Ensalada
Nicoise, anchoas de Mar del Plata, huevo, papines, chauchas, cebolla morada y
alcaparrones
Espiral
de papa y zucchini, ricotta casera, limón, almendras y guisantes
Koftas
de cordero, salsa de yogurt, pico de gallo, ensalada de hierbas y cebolla
morada
Pesca
del día, salsa romesco, espárragos, avellanas y limón
También
hay brunch en CENTRO…
Se sirve de 12 a 16hs. Hay 4
platitos, 3 salados y 1 dulce para compartir. Incluye bebida: copa de vino o
cocktail + café. También hay otras opciones tipo brunch para pedir a la carta
;)
Avocado
toast de arepa, palta, tomates cherrys y huevo
Shashuka,
salchicha parrillera de cerdo y hierbas frescas
Otros recomendados
para probar son el pollo frito con salsa
guasacaca de palta y kétchup de estilo coreano (una combinación muy original
de Venezuela y Corea); el asado
banderita braseado con arroz aromático, kimchi y pickle de vegetales para
los amantes de la carne y lo tradicional pero con un twist de onda; el Ssam, que es taco de ojo de bife,
lechuga, pickles, kimchi y hierbas frescas; y la burratina tan pedida a la entrada, con tomates frescos, frutillas,
albahaca, consomé de frutillas y suero de burratina.
¡Y
hablemos de postres!
Crema catalana de manzanilla, bombón de hibiscus y
gel de vinagre de saúco + macarrón de rosas, chocolate blanco, infusión de
frutas rojas + varios postres más, pero
no logro descifrar cuáles son de su carta, así que no digo nada para no mandar
fruta, ¡cuá!
En
cuanto a bebidas,
en CENTRO hay (y descolla) la limonada
de Jamaica (con hibiscus, eso fue lo que tomé yo), aunque también hay limonada de menta y jengibre, Kombucha,
y sirven cocteles clásicos: Campari,
Ramazzotti Spritz, y más; y una cava bien variada y estupenda.
Además ofrecen café
de especialidad (a temperatura barista, pero se puede pedir más caliente).
¡Y
larga vida a su pastelería! Es horneada en el día, se ofrece lo que está en vitrina hasta agotar stock
;)
Estamos todos babeando, ¿no? ¡Venga! No nos demoro
más, ¡vamos a Centro! Que justamente está ubicado en el centro geográfico de la Ciudad de Buenos Aires (Aranguren 928, Caballito)… y no solo eso: ¡¡¡se
luce de mil maravillas en la planta baja de un edificio construido en 1940, de magnífico
estilo art decó!!!
Vanesa Protti, arquitecta de PROTTI
a cargo del proyecto Centro, buscó
destacar su estilo art déco y, al mismo tiempo, actualizarlo añadiendo toques
modernos. No solo es DIVINO, pero es un punto tan fotografiable que no puede
más: ¡París está viajando a Buenos Aires para verlo! :p
La
puerta principal y las ventanas se diseñaron con una estética antigua que
respeta la original del edificio. Ese punto marca otra de las particularidades
de este proyecto: varios elementos parecen de otra época cuando en realidad son
nuevos, así se logra transmitir una sensación de autenticidad y encanto
histórico.
La
base original del local se unificó
para lograr mayor amplitud y fluidez.
La elección de los materiales tuvo como premisa reflejar calidad y elegancia, con un fuerte acento en el mármol y la madera.
En
cuanto a la paleta de colores, el verde
domina la escena. Presente en diferentes tonalidades, más claro en las
aberturas y más subido en los azulejos de la barra y otros elementos, se lo eligió porque remite a la época, y
evoca frescura y serenidad.
Los
pisos, de mosaico graníticos, se
fabricaron de forma exclusiva para el local y siguen la misma gama. La iluminación busca lograr una atmósfera
íntima y acogedora, por eso es baja y suave en el salón, mientras que en la
barra se acentúa, resaltando este espacio como punto central del proyecto. El mobiliario repite la premisa de
conjugar lo clásico y lo moderno, lo que da como resultado una ambientación
ecléctica. Las mesas están
confeccionadas en madera y hierro, excepto la principal, que es de mármol verde
y se distingue como punto relevante dentro el restaurant.
¡Ahora
sí, volvamos a la noche del miércoles pasado!