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PLAY | I'm Gonna Be (500 Miles) – The Proclaimers
A este
cocodrilo le gusta comer choclo, que le acaricien el lomo y por sobre todas las
cosas, le encanta que abrigos le hagan cosquillitas en la panza.
Este barco
navegó muchas aguas en nombre de la paz y de la aventura. Sus colores
degastados dan cuenta de sus millas y de los besos salados del mar.
Este pececito
sigue al barco desde las costas africanas. Se encarga de anunciar su llegada y cuando
está contento (que es siempre) mueve su cola de chapa.
Como verán, estas
creaciones no son simples percheros u objetos que salieron al final de una larga línea de producción en masa. Son únicos,
irrepetibles y son la voz cantante de la capacidad creativa de Juli y Javier,
dos embajadores de la recuperación que decidieron seguir sus instintos para
perpetuar la vida útil de materiales nobles abandonados por ahí. Juli y Javi
son Oficio Mudo, ¡vamos a escucharlos cantar! :D
Oficio Mudo es el nombre que elegimos con Javier para nuestro emprendimiento de diseño
y decoración sustentable: un taller
donde disfrutamos CREAR con materiales recuperados. Tanto él como yo – Julia...
¡hola! - siempre nos sentimos seres creativos y estamos convencidos que todos
pueden crear, que todos tenemos ese potencial. Javier también es actor y yo
estudié comunicación social, y también para ser Doula (un pendiente). Somos
socios en lo laboral y en la vida también, padres de un pequeño de 4 años, que
es nuestro principal motor para seguir haciendo lo que nos gusta.
Una familia
de estrellas creativas hace hermosas estrellas :)
El
crear con materiales de ‘descarte’ (*) surgió cuando estábamos esperando
nuestro primer hijo. En aquellos tiempos solíamos hacer caminatas nocturnas
barriales por recomendación de la partera. En esas incursiones nos topamos con
hallazgos únicos, como hojas de ventanas, sillas talladas a mano, piezas de
metal, todo tipo de maderas que la gente tiraba. Nos parecía de locos que se
deshicieran de esas piezas pero para nosotros
la locura ajena fue el disparador para comenzar a jugar reutilizando materiales.
Al poco tiempo ya le encontramos el gustito a revalorizar lo que había sido
útil en algún momento o creado con
dedicación, tiempo atrás, por algún artesano. Hoy eso se convirtió en el
desafío diario de nuestra creatividad y la misión del taller: aportar a una cultura del “se puede crear y
hacer mucho con muy poco, sin
desaprovechar nada”.
(*)
Material que nuestra sociedad de consumo cree y/o considera –equivocadamente-
que no sirve más.
¡Cómo me gusta leer
historias emprendedoras que nacen cuando los hijos están a punto de nacer! :D
¡Leamos más!
¿Por qué Oficio Mudo?
El oficio mudo fue la primera forma de aprender que tuvo el Hombre desde el
inicio de los tiempos. ‘Mudo’ porque todavía no usaban un lenguaje para
transmitir el conocimiento. Así fue aprendiendo el ser humano, imitando,
observando. Y así nos pasó, 4 años atrás, cuando empezamos a recuperar materiales, crear y
transformar en piezas, objetos y muebles con nuestras manos. Rescatamos todo lo que valga la pena, de
ahí que somos eclécticos por naturaleza.
Me los imagino
explorando las calles con guantes y mirada bondadosa. Me los imagino cargando
el auto, soñado grandes cambios y la mejor forma de dejar su impronta…
En nuestro taller
hacemos objetos y transformamos muebles para paladares varios,
que aprecien el diseño, los materiales nobles, la originalidad y la
creatividad. Pueden encontrar desde un
escritorio estilo escandinavo, una silla antigua de colegio, una mesa típica de
bar, un perchero estilo industrial y muchísimos objetos de diseños únicos. Lo
que es común en todas nuestras piezas
son los materiales recuperados, la rusticidad de la madera envejecida, la
corrosión de los metales y el decapado natural que crean el tiempo, sumado a la
impronta gráfica del estampado artesanal (¡amo las tipografías!), con una
paleta propia de colores que inspira alegría en cualquier hogar.
Oficio
Mudo es un mix de todo esto :D ¡Mejor pasen y vean en nuestro Instagram, Facebook, tienda virtual o showroom!
¡Claro que sí!
Síganlos los buenos, los que creen en los objetos con alma, en los que
preservan la verdadera historia de las cosas, y en los que creen que podemos
expresarnos a través del reciclado. En mi humilde opinión, Oficio Mudo no tiene
nada de mudo: expresa a los cuatro vientos que la creatividad puede operar
maravillosamente al servicio de la personalización de los espacios y del
cuidado del planeta… ¡un fuerte aplauso para esta familia recicladora!
¡Muchas
gracias por compartir su historia y muy bienvenidos a Alma Singer!
Oficio
Mudo
Taller: Olivos (con
cita previa contactándose a hola@oficiomudo.com).
Showroom: Las Bartolas
Feria (Docks del Puerto, Centro comercial, Tigre). Calle Pedro Guareschi y el
Río, Puerto de frutos. Sábados y domingos de 10 a 20hs.
Todas las fotos de este
post pertenecen a Oficio Mudo.
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